Marco para la acción fundamentada en tiempos de crisis

Identificar un área de interés y una necesidad real

Las acciones están guiadas por la compasión y la comprensión. A fin de relacionarse de forma apropiada y responsable con las personas y comunidades afectadas por una crisis, es necesario tomar distancia para comprender la situación e identificar una necesidad real relacionada con la crisis.  

Deben mantenerse conversaciones con la comunidad o las personas afectadas para identificar y verificar las necesidades. Esto sienta las bases para entablar relaciones de respeto mutuo y garantiza que las acciones sean recíprocas y respondan a las necesidades.

Preguntas de orientación para la planificación, la participación y la reflexión continua: 

• ¿Qué está pasando? ¿Cuáles son los problemas?
• ¿Qué necesita el mundo o la comunidad? ¿Cómo sé si esta es una necesidad real?
• ¿Qué personas y comunidades están involucradas y de qué maneras? ¿Quién se ve más afectado por esta situación?
• ¿Qué habilidades tengo para contribuir?

CONSEJO:  

En tiempos de crisis, la selección y evaluación de las fuentes es especialmente importante. (Véanse los recursos sobre discernimiento de la información, análisis de fuentes y pensamiento crítico).

Profundizar la comprensión y diseñar un plan de acción

Para diseñar y emprender acciones responsables y apropiadas que ayuden a los afectados por las crisis, es necesario comprender situaciones complejas y ser conscientes del contexto en el que se desarrolla cada acción.  

Una postura compasiva implica comprender la naturaleza compleja y sistémica de cualquier crisis. Para que una acción sea significativa, es necesario comprender las complejidades de las cuestiones subyacentes a la necesidad identificada.

Los alumnos colaboran con miembros de la comunidad para profundizar la comprensión, determinar acciones apropiadas y diseñar un plan de acción que aborde la necesidad identificada. Entienden que la acción ética se basa en el diálogo y la colaboración recíproca, en el respeto y en un sentido de responsabilidad para con los demás y el planeta. 

En tiempos de crisis, es especialmente importante realizar una evaluación clara de los riesgos potenciales para los alumnos y otros miembros de la comunidad escolar que participen.  

Preguntas de orientación para la planificación, la participación y la reflexión continua:   

Profundizar la comprensión

• ¿Qué conocimientos nuevos podría necesitar?
• ¿Por qué existen las necesidades que se han identificado? ¿Cuáles son las cuestiones subyacentes? ¿Con qué cuestiones locales y globales se relaciona esto?
• ¿Cuáles son las diferentes perspectivas implicadas? ¿Cuál es mi propia perspectiva y cuáles son mis suposiciones? ¿Qué implica esto para nuestra forma de entender la situación y las posibilidades de actuar en colaboración
• ¿Qué perspectivas sería importante considerar que aún no hayamos escuchado?

Planificar, anticipar y evaluar

• ¿Qué consideraciones éticas hay?
• ¿Cómo puedo contribuir a que no se vea a las personas afectadas como carentes [de dinero, educación, etc.] y necesitadas de nuestra ayuda, sino a que se consideren y valoren los recursos que sí tienen?
• ¿Qué acción sería apropiada? ¿Cómo puedo saberlo?
• ¿La acción propuesta ayuda a fomentar la agencia individual y colectiva?
• ¿Cómo podemos actuar en colaboración?
• ¿Cuáles podrían ser los efectos y consecuencias de mis acciones a corto y largo plazo? ¿Cómo puedo asegurarme de que la acción beneficia a todas las partes involucradas?
• ¿Qué recursos necesito?
• ¿Esta acción acarrea algún riesgo?
• ¿La acción propuesta tiene el potencial de generar un compromiso sostenible a largo plazo?

Responder a una necesidad real de manera fundamentada

El contexto importa. Lo que una persona o comunidad puedan y deban hacer en una crisis dependerá del contexto en el que vivan.

Los alumnos pueden emprender acciones individualmente, con colaboradores o en grupos. Siempre que sea posible, las acciones deben implicar trabajar junto con miembros de la comunidad y comunicarse continuamente con ellos. También pueden convertir las acciones locales en acciones globales por medio de colaboraciones con alumnos de otros pueblos, ciudades, países o continentes. La tecnología permite establecer contactos para compartir iniciativas, colaboraciones e impactos.

La acción ética y responsable está fundamentada, responde a una necesidad real y se basa en un compromiso colaborativo y recíproco con la comunidad.

Preguntas de orientación para la planificación, la participación y la reflexión continua:  

“Durante la acción” 

• ¿Esta acción se siente auténtica?
• ¿Mis acciones están bien pensadas y son consideradas?
• ¿Cómo me hace esta experiencia cuestionar mis suposiciones? ¿Qué nuevas perspectivas me está aportando?
• ¿Qué efectos o consecuencias imprevistas estoy observando?
• ¿Estoy trabajando en colaboración con otras personas de forma sensible y eficaz?
• ¿Cómo estoy experimentando las interacciones con los colaboradores de la comunidad?
• ¿A qué dificultades me enfrento? ¿Cómo puedo abordarlas?

“Después de la acción” 

• ¿Qué aprendí sobre las personas con las que trabajé y qué aprendí de ellas
• ¿De qué maneras ha beneficiado esta experiencia a todas las personas involucradas?
• ¿Qué pueden aprender los demás de mis experiencias?
• ¿Cómo se pueden aplicar mis experiencias a otras situaciones?
• ¿Cuáles podrían ser los siguientes pasos? ¿Quién podría participar?

La reflexión es continua y favorece el autoconocimiento y la comprensión del contexto más amplio de la comunidad y la sociedad.

Los alumnos examinan sus pensamientos, sentimientos y acciones aplicados al contexto de sí mismos, la comunidad y el mundo a lo largo del proceso, e identifican momentos importantes que son fruto de nuevos conocimientos y situaciones.

Los colegios fomentan y apoyan las prácticas reflexivas y distintas formas de expresión. Se crean espacios seguros para que los alumnos compartan sus experiencias y su aprendizaje. Compartir y suscitar respuestas de otros ayuda a los alumnos a reflexionar y profundizar su comprensión.